Colaboración o competencia?

Como verán en todos lados se cuecen habas. Cambien el lugar y ... el siguiente texto me exime de comentarios:

Jose Luis Carranco (Director de la revista Sumissa, España) dice en Facebook

"Querido amigo Andrés, te doy la razón en lo que comentas. Siempre me ha parecido de idiotas querer pertenecer a un grupo exclusivista, existen, y es verdad que muchos van picando aquí y allá, buscando su sitio, y como bien dices, finalmente ... lo encuentra en el salón de su casa con esos amigos que tampoco encuentran su sitio en los grupos del gurú de turno que desprecia lo que los demás piensan y sienten, ya que no coinciden con su doctrina, o sencillamente no le sigue a pies juntillas.

Llevo ya décadas intentando ese acercamiento positivista, con casi nulo éxito, exceptuando contadas excepciones de personas que desean realmente que haya una cierta unión entre todos por el bien común, esforzándose, intentando acercar posturas, en vez de alejarlas. Pero son una minoría, una sana minoría, a veces lo veo como el comienzo de algo importante y al final no se pasa de ese comienzo y todo termina en aguas de borrajas.
Han pasado 40 años ya del oscurantismo de la dictadura franquista. Las generaciones se renuevan, pero poco cambia mientras realmente no haya unas ganas sinceras en apoyarse unos a otros independientemente de la mentalidad o "normas" de cada uno.

No creo en la competencia, sino en la colaboración a ultranza, aunque sencillamente sea el intercambio de información, el intentar promocionar todo lo más posible los movimientos de cada grupo, pero hacerlo entre todos. Y sí, estoy hasta las narices, y hace algunos años hice el borrón, pero el borrón de apartarme de todo grupo BDSM. Incluso me botaron de uno de ellos, sencillamente por mis ideas, quizás revolucionarias, de decir, por qué no llamas a quien organiza aquí y allá otros encuentros y se intenta unir en reuniones a personas de diferentes lugares y pensamientos. Nulo esfuerzo por mi parte. Cada maestrillo tiene su librillo, y no quieren discutir, compartir o intercambiar pensamietos y sentimientos de sus librillos más que con sus acólitos que les dan la razón ciegamente.
No hablo de la creación de un grupo o asociación nacional BDSM, eso sería una tontería y una estupidez por mi parte, hablo de la colaboración de todos los que hacen algo y se mueven por crear movida en un mundillo demasiado estacionario, demasiado comodón, que quieren que los demás se muevan para montarle sus fiestecillas y que encima se quejan.

Aquí no colabora uno con otros ni dios. Quizás porque el dictadorcete del grupo teme que otro pueda tomar el "control" de su rebaño. Una estupidez como otra cualquiera, cada uno está donde le gusta. Ahora de nuevo intento salir a la palestra activa, de nuevo pongo lo que tengo para aunar esos esfuerzos por el bien de la comunidad, pero el ambiente no ha cambiado, todo sigue igual, las nuevas generaciones sencillamente se ven huerfanas de esa hermandad tan necesaria.

No merece la pena luchar contra molinos de viento. De nuevo me veo alejándome del mundillo y pasando de todo. Como bien dices, refugiándome en el salón de casa.
Fíjate que hablo de compartir por ejemplo información, vano intento por mi parte. Quizás soy idiota por intentar despertar conciencias para sólo recoger aire.

También me canso de oír que hay más movida ahora en Madrid o aquí o allá, un espejismo más. Puede que haya una o dos personas esforzándose y dando el callo en tal o cual ciudad y parece que hay más movida, pero esas personas se cansarán, como ha ocurrido en infinidad de ocasiones, y cuando menos lo esperes, hasta esas pequeñas movidas desaparecerán de nuevo, trayendo otros periodos de oscuridad e inactividad, hasta que aparezca de nuevo alguien queriendo hacer cosas.

¿Pesimista? es posible, aunque me veo más bien realista, lo he visto ya demasiadas veces.
Hasta que los que organizan eventos y grupos no se unan, aunque sea para eso, compartir información, promover lo que hacen otros sin pensar que eso le puede quitar "ovejas" a su "rebaño", poco cambiará la cosa. Como dije: muchos, pequeños y prisioneros.
No obstante, a pesar de mis palabras sigo creyendo que hay algunas personas que se esfuerzan y que son los que hacen que merezca la pena intentarlo de nuevo, intentar que la palabra colaboración no sea una palabra vacía en el mundillo este nuestro llamado BDSM.

Joder, a lo tonto vaya ladrilazo he escrito!"

José Luis Carranco

Nada que agregar, ni quitar, ni explicar

Sir Williams